Toma Control de tu Alimentación
Cortesía de: Lcda. Joselyn Pérez Reyes, LND, MNOCC
La clave está en tus manos
No es necesaio que tengamos utensilios para medir y porcionar todo lo que comemos. Nuestras manos nos pueden ayudar. Podemos utilizar las manos como instrumentos de medición recordando que cada cuerpo es distinto y que cada uno tendrá necesidades nutricionales particulares. Veamos ideas a continuación.
- La porción de los vegetales puede representarse con las dos manos llenas.
- La porción de frutas y farináceos es equivalente a un puño cerrado.
- La porción de las grasas es representada con la mitad del dedo pulgar.
- La porción de queso rebanado será equivalente al ancho de los dedos índice y del corazón unidos.
- La porción de las proteínas o carnes rojas, blancas y pescado podremos calcularla con la palma de la mano abierta sin incluir los dedos.
- La porción de la mantequilla podremos calcularla con 1/3 parte del dedo índice.
- La porción para consumo de semillas se calcularía con un puñado que tenga los dedos unidos y cerrados.
Elige tu estilo de vida
Muchas veces nos preguntamos: ¿por qué no tengo energía?, ¿por qué estoy tan cansado?… ¿Has pensado en los alimentos que consumes? Necesitamos de los alimentos para mantener la energía pero a veces, nos dejamos ir, ya sea por la prisa o conveniencia, olvidándonos del dicho: somos lo que comemos.
Para que tengamos energía tenemos que consumir alimentos de buena calidad. Pero, ¿comer saludable no implica gastar mucho dinero?…
Utiliza tu ingenio
Podemos estar alertas a las ofertas y a las alternativas de temporada para que el costo de las frutas y vegetales frescos a consumir a diario sea menor. También podemos intercalar el consumo de frutas y vegetales frescos con el consumo de congelados. La aportación nutricional de los congelados es similar puesto que la congelación preserva los nutrientes. En el caso de los vegetales será importante cocinarlos no más de 5 minutos al vapor.
Muchos de nosotros tenemos la intención de comer más pescado. Tratemos entonces de escoger alternativas locales y de temporada para que el costo sea menor.
Se nos recomienda consumir carne roja de 2 a 3 veces por semana. Será importante que sean magras o bajas en grasa y que sean carnes blancas, como pollo o pavo.
Por otra parte los huevos son buena fuente de proteína y hierro. Estos podemos consumirlos 3 veces por semana.
En cuanto a los granos integrales, será importante que el primer ingrediente en la etiqueta sea efectivamente el grano integral (“whole grain”). Así nos aseguramos de consumir las propiedades del grano completo.
Y será importante saber que sí existen “grasas buenas” con beneficios valiosos para la salud. Estas grasas están en el aguacate, las aceitunas, y semillas como almendras, pistachos y maní, y en el coco en cantidad moderada y esporádica.
La leche y su grupo de derivados debe seleccionarse siempre bajo en grasa. Será importante el consumo de agua, de al menos 8 vasos diarios o el equivalente a 64 onzas. En realidad nada mejor que el agua como bebida principal.
Y no olvidemos el ejercicio, la actividad física y el movimiento ya que el cuerpo está diseñado para moverse. El sedentarismo va en detrimento de la salud y está asociado a condiciones como la obesidad.
Practiquemos los consejos anteriores. Hagamos que todos formen parte de nuestro ESTILO DE VIDA para que gocemos de mayor salud y energía todo el tiempo.